domingo, 30 de diciembre de 2012

Resident Evil Revelations, un buen juego



Resident Evil es una saga longeva, con muchos títulos a sus espaldas, con algunos mejores que otros pero siempre una saga a considerar. Sin embargo el deterioro experimentado por la misma en los últimos tiempos y el poco sentido común de una Capcom que piensa que el survival es un género en decadencia ha llevado a cuestionar más que nunca las nuevas entregas que van saliendo, bien sean las numeradas o los spin-off. Por suerte, a los poseedores de una Nintendo 3DS, no nos ha tocado sufrir en esta ocasión una decepción porque, seguramente, Resident Evil Revelations es uno de los títulos más destacables y respetables del catalogo de la portátil nintendera. Veamos el porqué. 

El primer punto a favor de este juego es su irremediable tufo a survival. Probablemente hubiéramos querido que fuese mucho más surivival de lo que finalmente es pero es una buena ración si los comparamos con la tendencia a la acción simple y llana de la que goza en los últimos títulos, especialmente los numerados (el 4, 5 y 6). La historia se centra en un barco por lo que ese será nuestro escenario a lo largo del juego (descontando un par de fases fuera del mismo) y esa ha sido una sabia decisión porque: 1. los espacios son más cerrados y agobiantes y 2. hay muchas puertas y zonas diversas que van ampliando nuestro radio de acción. No es la gloriosa mansión del primer resident pero oye, menos da una piedra. En su contra tiene que no es un juego que dé demasiados sustos pues más o menos te esperas los lugares donde puede haber “problemas”. Por tanto, tenemos un survival que podría ser mucho más survival y que se le aleja del terror/horror más de lo que debería. 

El segundo punto es su trama y personajes. Tenemos a Chris y a Jill, marca de la saga ya forever and ever pero han aparecido unos cuantos personajes realmente buenos como Parker, Jessica u O´Brian que podrían dar mucho juego en futuras entregas. Respecto a la trama se podría decir que es muy mejorable porque tiene algunos altibajos pero me quedo con el entretenimiento que suscita durante todo el juego y las ganas de saber los próximos giros de la historia. 

El tercer punto es su presencia técnica. El juego es técnicamente el mejor del catalogo de 3DS a falta de ver que hará la misma Capcom con el Monster Hunter. Tiene grandes modelados y texturas, dispone de escenarios vistosos y juega con muchos efectos diversos que realmente lo convierten en una apuesta muy respetable. El único pero que tiene son algunas caídas parciales de frame rate bastante cantarinas y por suerte bastante focalizadas. 

El cuarto punto es su sistema multijugador. El juego ofrece el famoso modo Asalto para extender algo más la vida útil del juego que vendrá rondando las quince horas siendo generosos. Esta modalidad, que también puede jugarse individualmente, ofrece la posibilidad de volver a determinados escenarios, realizar misiones, conseguir nuevas armas y personajes desbloqueables y subir nivel como si de un action rpg se tratase. En esta modalidad se puede jugar al cooperativo vía online, lo que resulta un aliciente más para este señor juego. 

¿Qué cosas son mejorables? 

1. El control. Si Capcom y Nintendo tuvieron que sacar el famoso “megazord pro” para poder introducir el segundo stick nos podemos hacer una idea de lo intrincado de su manejo. Eso no quiere decir que no podamos domar el sistema al cabo de unas horas pero desde luego Capcom debería haber facilitado más su accesibilidad. Nintendo tampoco ha sido espabilada evitando el segundo stick. 

2. El otro punto importante es la sensación de repetición que se experimenta en el modo Asalto. Debería ser un modo más exclusivo, más diferente de la historia principal si se quiere, para conseguir tener un juego lo más redondo posible. 

3. Y por último prefiero que vuelvan los zombies. Estoy harto de Bows, hunters y bichos de diversa índole sacados de mentes aficionadas al terror. Por favor, Capcom, vuelve al horror survival cuanto antes. 

En fin, no tengáis dudas con respecto a este juego. Tiene cosas mejorables pero es sin duda un buen juego y uno de los mejores resident evil de los últimos tiempos. Aún se puede ampliar la experiencia survival pero vamos por la buena sintonía si exceptuamos, claro está, lo que está ocurriendo con la saga numerada. Eso no lo quiero ni en pintura. 

Salu2! 

PD: Capcom, perra, queremos segunda parte y no porteos a otras consolas. Ea!

domingo, 16 de diciembre de 2012

Críticas cinéfilas (84): El Hobbit, un viaje inesperado



Director: Peter Jackson
Año: 2012 
NOTA: 8,5 

Hace casi una década desde el cierre de aquella gigantesca adaptación cinematográfica de El Señor de los Anillos que Peter Jackson y su equipo afrontó con la decisión y riesgo de aquellos que estaban predestinados a hacer algo grande o perecer en el intento. Lo que era imposible vio la luz y la Tierra Media de J.R.R Tolkien cobró vida propia. El séptimo arte y público rindió pleitesía a semejante obra magna que devolvía la grandeza al género de la fantasía y la aventura y que nos hacía participes del inmenso viaje y sentimientos de aquellos personajes azotados por las circunstancias. Todo cambió cuando la Comunidad del Anillo cerrara su andadura en el monte del destino y la Tierra Media inundara las casas del mundo entero: la magia de Tolkien nos desbordó a base de sentimientos inenarrables. Peter Jackson lo sabía y aunque ha estado remolón (y no exento de problemas con la producción de la cinta) por fin nos trae el regalito de Navidad que queríamos: volver al cine de la mano de El Hobbit, la adaptación del entretenido cuento de Tolkien previo a la Guerra del Anillo.

(OJO SPOILERS) 

Esta primera parte titulada “Un Viaje Inesperado” es el comienzo de una nueva trilogía cinematográfica, elemento que no ha pasado desapercibido para nadie que conozca el cuento pues éste no llega ni a las 300 páginas. El Hobbit tiene unas características particulares que cuesta discernir como le sentará una adaptación estirada o servir de enlace con el Señor pero esto es un debate tempranero para sacarlo a relucir en este momento. Mis impresiones tras los 169 minutos de película son notabilísimas, casi podría decir que es una delicia aunque tiene algún pero que empaña el sobresaliente. Desmenucemos. 

PRÓLOGO ESPECTACULAR. No lo puedo catalogar de otra manera. El inicio de Bilbo (con Ian Holm interpretándolo) rememorando la historia antigua de la ciudad de Erebor es una maravilla. Cuenta lo que tiene que contar, se disfruta y te pone en antesala de la figura amenazante de Smaug. Lo hace todo bien (desde luego Peter con los prólogos siempre está tocado por mano divina). También vemos a un Frodo risueño virgen todavía de lo que en el futuro le iba a tocar vivir. Al principio rechisté con los cameos pero me han gustado por breves y discretos. Quedan bien.

PRESENTACIONES LÓGICAS. Aunque la crítica más feroz ha cargado contra el inicio de la película por lo dilatado de sus presentaciones la verdad es que El Hobbit cuenta con un grupo protagonista bastante grande y lo más sabio es perder algo de tiempo presentando a los personajes (y más cuando tienes a 13 enanos en plantilla). Desde mi punto de vista no lo considero un error sino un mal necesario que luego se traslada positivamente a la historia. Incluso viendo que algunos personajes han quedado muy en segundo plano no tengo dudas que potenciaran su participación en la siguiente. 

SENTIDO DE LA AVENTURA Y COMEDIA. La película cuenta con estos dos elementos muy potenciados, que es como debía ser. Más allá de los tintes épicos que Jackson le haya querido incrustar a esta película lo cierto es que son las aventurillas lo que mejor la acaba definiendo. Persecuciones, viaje, misterios, chascarrillos y peligros funcionan a la perfección. Igualmente ocurre con los momentos cómicos, muy bien planificados y distendidos alejando ese tono más serio y oscuro de El Señor de los Anillos (la comedia tampoco ha gustado a la crítica...¿le ha gustado algo?). El mejor sin duda el encuentro con los tres orcos. Divertidísimo. 


ACERTIJOS EN LAS TINIEBLAS. Lo mejor de la película para un servidor y seguramente uno de los mejores momentos de cine fantástico desde ya. No solo transmite las líneas escritas por Tolkien sino que las potencia y las recrea con eficiencia enfermiza. Gollum (Andy Serkis) se come la pantalla. 

LIDIANDO CON EL RELLENO. He aquí el primer problema que tiene la película: la información que suelta paralela a la historia principal. Aunque un fan de Tolkien no deje de disfrutar oyendo y viendo cosas como Dol Guldur, Amon Sul, el Nigromante, Gondolin o Ungoliant lo cierto es que no deja de ser relleno anexo que rompe el ritmo sobremanera. Estas ampliaciones, por guays que sean, no dejan de sumar metraje dilatando todo de manera artificial y resintiendo el ritmo. Algo parecido pasa con Azog y su venganza contra Thorin o con el bueno de Radagast y su escena de los conejos.

REVISION DE ESCENAS ESTILO PETER. Vuelven los planos aéreos, vuelven las batallas estilo Peter e incluso vuelven (en forma de guiños) escenas repetidas. Este es el otro punto que me disgustó algo de la película. Es evidente que Peter Jackson tiene su forma de filmar y ahora no vamos a venir los espectadores a cambiársela pero me ha parecido muy complaciente ver como algunas escenas son calcadas al Señor. Ejemplo lo tenemos cuando Bilbo se pone el anillo, idéntica a la de Frodo en La Comunidad del Anillo. Algo parecido pasa con las águilas. Estos guiños con tendencia al autoplagio me chirrían un poco de un tío tan perfeccionista. 

CASTING. Fantásticos todos. Que Martin Freeman lo iba a bordar tampoco iba a sorprender a nadie pero que Richard Armitage estuviera impecable como Thorin sí ha sido una grata sorpresa.


FOTOGRAFÍA. Andrew Lesnie está impecable. Rivendel es orgásmico. 

TECNICAMENTE SOBERBIA. No tengo palabras. Pluscuamperfecta. Y eso que no me gustó demasiado que optaran por digitalizar todas las criaturas. Eso sí, los orcos o Gollum auténticas maravillas técnicas. 

MUSICALMENTE COMEDIDA. Howard Shore ha compuesto una banda sonora de lo más interesante, con bastantes temas nuevos y algunos realmente geniales. Pero me quedé algo desilusionado al ver que en la película se han decidido mezclar demasiado con las partituras de la trilogía del anillo. Me hubiera gustado que se hubiera independizado algo más. 

3D 48FPS. Opté por esta modalidad para ver que tal era el polémico 3D a 48 fotogramas por segundo y la verdad es que salí bien contento de la experiencia. En los primeros minutos chirría un poco a nuestros ojos pero una vez acostumbrado todo discurre a la perfección (y eso que las gafas del cine eran más bien barateras). Buff, el momento de las águilas hay que verlo en este formato. Es especial. 

En fin, muy contento con esta primera parte. Años después la vuelta a la Tierra Media ha sido un placer fantástico del que no me arrepiento en absoluto, es más, las ganas por ver la segunda parte son irrefrenables ya. Ni se puede decir que es más de lo mismo ni que es un producto independiente de la trilogía del anillo pero sea cual sea el encaje final de estas películas yo espero (y deseo) que aspire a ser una obra referente del cine de aventuras y de fantasía. El primer paso está dado. 

Salu2! 

PD:A ver si me animo y escribo algo sobre la trilogía del anillo.

lunes, 3 de diciembre de 2012

Once Upon a Time - Primera Temporada



Esta debe ser una de las series más raras que he visto en los últimos tiempos. Coger el imaginario de los cuentos clásicos y modernos, rejuntarlos, reditar sus pasajes e historias y crear una nueva es la seña de identidad básica de esta curiosidad televisiva. Es quizás por eso por lo que la serie de la ABC ha tenido tan buena acogida de audiencia, por ser un producto atípico que a su vez nos resulta muy conocido por todas esas historias y personajes populares de la literatura y ficción que tan buenos momentos (y malos) nos ofrecieron en su día. Pero tiene algo más, algo que lógicamente tira del carro y que ha hecho que la serie no se estrelle tras varios capítulos: el morbo. Sí, es el morbo de situar a personajes de fantasía y de muy diversa índole juntos en un mismo pueblo sin saber nada sobre quienes son y qué hacen allí. Expliquemos esto algo mejor. 

La serie nos sitúa en Storybrooke, un pequeño pueblo donde Henry vive con su madre, Regina Mills, una mujer severa y dura que para más inri es la alcaldesa de la población. El tal Henry, en una de sus locuras tempraneras, decide hacerle una a visita a una tal Emma Swan sin motivo aparente. El chico arenga a la detective a irse con él a Storybrooke revelándole no solo que ella es su verdadera madre sino que también es la clave para la salvación del pueblo. Emma se irá con él iniciando así la Operación Cobra, que no es otra cosa que romper el hechizo que mantiene a su población encerrada (y congelada en el tiempo) en Storybrooke. Entre esa población tendremos a nada más y nada menos que a gente del calibre de Blancanieves, Encantador, Pinocho, Caperucita Roja, los siete enanos, Rumpelstilskin o el Sombrerero Loco. Toda una party hard. Mola, ¿eh? 

Yo reconozco que al principio arqueaba la ceja a lo Carlos Sobera con cada capitulo porque me parecía imposible que aquello pudiera funcionar. ¿Cómo es posible que viéramos aquello que parecía la idea trasnochada de un guionista sin su medicación? Pues bueno, algo tendrá cuando está en plena emisión de su segunda temporada ya. Ese algo lo asocio, como decía al principio, en el morbo que desprende ver a Blancanieves y compañía en una historia diferente a las suyas de origen, reinventándolo todo y buscando un crossover definitivo que resulte lo más interesante posible. De momento ese crossover funciona, mejor o peor dependiendo del capitulo, pero funciona. Todos los personajes de cuento pertenecen, en esta serie, a un mismo mundo lo que ha facilitado que sea algo más creíble todo en su conjunto porque de cualquier otra manera hubiera sido caótico. Por tanto, ver a Rumpelstilskin codearse con personajes de Disney de momento está bien. 

Otro elemento que se ha mencionado bastante es el parecido estructural que tiene con la mediática LOST. La cadena ABC buscaba el nuevo pelotazo, una sucesora a una de sus series más relevantes y aunque argumentalmente son polos opuestos, en su estructura encontramos varios parecidos. El primero y más elemental es el grupo de personajes amplio que la serie maneja. Todos los personajes comparten un protagonismo y solo tres, cuatro o cinco son los de mayor envergadura para el guion. El segundo elemento es el de capítulos dedicados, es decir, hay capítulos donde cada uno de los personajes es el verdadero protagonista. Eso se refuerza conociendo su historia mediante flashbacks, recurso muy habitual en la serie de los losties. A ver cuanto tardan en aparecer los flashforwards… Y el tercero y último es la recreación de un lugar “especial” en el que ocurren cosas extrañas: en Lost era una isla y en esta es Storybrooke. 

Los actores están bien y cumplen su función. De momento quien parte la pana son Lana Parrilla (Regina) y Robert Carlyle (Rumplesti) que mantienen una interesante pugna por ver quien es más villano y quien la lía más parda. Ya en un segundo nivel tenemos a Jennifer Morrison (Emma), Ginnifer Goodwin (Blanca) y Josh Dallas (James) que tampoco se desenvuelven mal. Pero quien sin duda son mis favoritos ahora mismo son una caperucita roja (Meghan Ory) un poco Amy Winehouse o el Pinocho motero/macarra interpretado por Eion Bailey. No me esperaba semejantes recreaciones. Y por último comentar lo ridículamente horrible que es técnicamente. Por favor, señores de la abc productions, cúrrenselo un poco más o al menos que no se noten tanto los cromas. Muy mejorable y espero que la segunda temporada afinen mejor en este tema. 

Pues esto ha sido mi visión de la primera temporada de Once Upon a time. Yo la recomiendo aunque sea una serie muy particular. De momento entretiene aunque llegará un momento en que desvariará, eso tenedlo por seguro. En breve comenzaré la segunda temporada y ya he oído algunos de los nuevos personajes que aparecen. La cosa promete, cuanto menos. 

Salu2! 

PD: Ya falta menos para el Hobbit! OMG!!!!